Vive la vida me decía. Se feliz, disfruta de tu bonita juventud. Y me lo decía él, un chico de 15 años. Claro todo era por la situación, el momento, el lugar... Imáginate a dos chicos morenos por el día tan bueno que habían pasado en un río, cansados, recien cenados, y mienrás el sol comenzaba a ausentarse estábamos él y yo fumando una cachimba de coca-cola en el balcón con la brisilla típica del verano cuando anochece.Un precioso momento, para recordar o ¿no M?
Porque, nose, yo creo que desde hace años estábamos en el mismo camino. En ese en el que nos lo íbamos a pasar genial, que con una mirada nos empezáramos a reir sin parar, a que con su compañía te sintieras segura y muy agusto. Que juntos nos contáramos todo sin quitarnos un mínimo detalle. Porque sin darme cuenta, sin darnos cuenta, nos hemos cogido mucho cariño y mucha confianza.
Te quiero pequeño.
No hay comentarios:
Publicar un comentario