martes, 28 de junio de 2011

-Dame el beso de mi vida. Quiero acordarme de este momento siempre. Te quiero Marcos.
-Elena, no te voy a dar el beso de tu vida porque todos los días de nuestra existencia juntos tiene que tener besos perfectos, para recordar. ¿Solo de este momento? Yo por el contrario no quiero, sino que voy a acordarme de cada momento vivido junto a ti desde que te conocí esa tarde del 3 en Zara. Estabas preciosa. Y para mí ya sabes que simpre lo estarás. Yo también mi princesa.
- ¿El qué?
- Que yo también te quiero. Eres la mujer de mi vida Elena. Te quiero, te quiero y te quiero. Hasta el infinito.
-¿Solo hasta el infinito?
-Hasta el infinito y más allá. Mucho más lejos.

No hay comentarios:

Publicar un comentario