domingo, 1 de junio de 2014

Los VII pecados de tu nombre

Los siete pecados capitales de las mentes desconfiadas y viciosas, como el mismo nombre que el pecado alberga, en tus capitales, claro está. 

Daremos comienzo a este humilde sermón con la lujuria de tu sexo, también llamado las ganas que te tengo, que nos tenemos. Las cosquillas que me entran nada más verte, los sudores de una cama congelada por las lágrimas derramadas por algún imbécil, véase como tú. Todas las puestas de sol que se esconden para darnos más intimidad para sacar nuestro vicio más interno y carnal. Siento cortar el rollo, pero no quiero ser una pecadora.

Bien, pasamos a la pereza, dícese de aquel pecado que nos provoca malestar o vagancia de algo o hacia alguien. La pereza de abandonar esos ojos marrones, exactamente del mismo color que el libro de mi próximo examen. Que causalidades tiene la vida (y qué pocos aprobados). La pereza que me provocan las despedidas y los despedidos, siempre tiene que esta presente la igualdad. Continuemos, ahora viene la gula (no la del norte, no os preocupéis no estoy como para hablar de ese tipo de comida). La gula y el empacho de comernos, de llenarnos de nosotros, sentirnos dentro. La gula de lengua y las leguas que nos separan del cielo, del pleno paraíso.

De aquí a la misma ira hay un paso, lo furiosa que me siento cuando me cortan el agua, cuando las tostadas son más negras que mi rimel y cuando mi móvil se queda sin batería de fiesta. Sí, aunque pensándomelo mejor, eso más que ira provoca relax y seguridad; seguro que así no te envío un mensaje diciéndote, borracha, lo de menos que te echo... con la consiguiente vergüenza de mi más dolor de cabeza del día siguiente.  Pero si de verdad se quiere saber lo que es la ira, despiérteme de una siesta que seguro que en esos momentos echas de menos a la mismita Maléfica con sus cuervos y todo... o ¿contigo? No sé, la resaca, joder. 

Luego vendrán la envidia y la avaricia. Los junto como si esto fuera un tango capital, de esos con rosa en la boca y todo. La más pura envidia de tu cuerpo y de como se mueve al unísono de las sirenas de la calle, la avaricia que te tengo. La envidia de los viernes a la salida del recreo y la avaricia de aquellos que hacen de los días, sus días; de un verano, su verano. La envidia de la gente que conmueve con las letras, la avaricia de unos que solo quieren ser escuchados, o los que solo quieren escuchar lo que vayan con ellos. Qué triste... De nuevo la ira y un poco de lujuria. 

Para acabar, que la brevedad es una virtud, hablaré de la soberbia de algunas sonrisas. La soberbia de la gente que va por la calle con la cabeza bien alta, la soberbia de la felicidad que cada vez castiga a más gente. La soberbia de creer que tú eres el centro de mi mundo. La grandeza de ver que las penas con dos copas son menos penas, la grandeza de derrocar al mismo Goliat, la grandeza de ser tú y sentirte orgullosa de ello. Que gran soberbia la mía al pensar que mis palabras pueden llegarte y ayudarte. 

Los siete pecados capitales de la vida, de mi vida.

Los siete pecados de la capital de tu nombre.

jueves, 16 de enero de 2014

Dark Horse

Terror al folio en blanco, borras, escribes algo ingenioso que terminará perdiendo lo ingenioso y tan solo se quedará en algo. Borrar. Lees de nuevo lo escrito, no te convence... a mi antes no me costaba tanto, o eso creo. Escuché lo que las malas lenguas cuentan; hablan de que la felicidad no es para explicarla y plasmarla en un papel. La felicidad es para aprovecharla, para exprimirla. ¿Puede que ese sea mi mal? ¿Puede que la felicidad haya arruinado mi visión creativa y poética de la vida? Ojalá todos los males fueran de este calibre. Ojalá todas las armas estuvieran llenas de un poquito de esta dinamita.

Propósito de este nuevo año, escribir más, hablar mejor, comprender al incomprendido y luchar por cosas que son complejas, en las que tirar la toalla es la opción más sencilla. Me he dado cuenta de que las cosas no se solucionan con cuatro lágrimas y que si tú no das nada, "nada" será tu única compañía. Que los amigos son para siempre y las críticas de gente desconocida son demasiado furtivas, un poco zorreras. El amor... qué digo yo del amor. Mejor no decir nada y seguir enseñando mi anillo que me une siempre con él. 

Siempre habrá malos días y colores nublados que no pegarán bien con tu sonrisa. La mejor sinfonía de una grabación que nunca debió salir a la luz, que los porteros de una discoteca se sepan nuestros nombres, una familia formada en unos cuatro meses. Cuatro amigas que nunca se separan, da igual que estemos desperdigadas buscando lugares para poder compartir. Una ratita que solo me echa de menos. Para cualquier problema acuda al consejo de sabios, seguro que salís más locos de lo que entrabais, pero si son amigos hacen oferta. Un huevito que llegó a la capital, y ahora va, y se mete en otro nido con tres pollos de diferente madre. ¡Qué majadería de vida! Un peluche con nombre, y un león que quiere ser perro. Los sueños ya se me quedan cortos, tanto tú, como yo sabemos que esto es mejor que cualquier fantasía, que cualquier cuento de ranas. Te prometo que seré tuya siempre, ni el diablo consiguió eso de mi.

Un piano de cola, la historia de una niña tocada en un fa sostenido. Su mayor cualidad sigue en funcionamiento. Sé que los días se hacen cuesta arriba y que cualquier cosa te afecta, que estás sensible y que no puedes más. ¿Crees de verdad que no merece la pena vivir todo esto? Es precioso y es tuyo, es nuestro. La grandeza del esfuerzo son las sonrisas que sacas, la complicidad que creas y el amor que suscitas no puede pagarse con monedas de oro. Que todo artista tiene que tener su musa, y la mía... la mía sois vosotros, caprichosos recuerdos que hacen que siga adelante. Luchadora de vosotros, de aquí al fin del mundo.

"El don de la palabra, la belleza de escribir y de la persona que dedica tiempo en ello teniendo como inspiración a la gente que más quiere"

miércoles, 2 de octubre de 2013

Here we go


Nunca me imaginé esto, echar tanto de menos...una parte de mi alma se ha caído, por unos instantes, del dolor. Esa sensación de no haber aprovechado tanto el tiempo como realmente hubieras deseado. Tantas peleas sin importancia que derramaron lágrimas que nunca deberían haber existido, tantos portazos, desprecios... tantos buenos momentos que siempre estarán en tu cabeza.

¿Dónde están los abrazos de "te entiendo, estoy aquí" que se daban con tan solo una mirada? ¿Dónde está esa niña incapaz de hacer un lavavajillas? ¿Dónde se ha quedado mi moto roja con todos sus recuerdos ahogados en gasolina?

Ojalá pudiera contestar que están aquí y ahora, ojalá. Quisiera derribar este muro de kilómetros que me separa de ellos, el que me separa de mi verdadero yo, de mi habitación, mis máscaras de Venecia, mi piano, mi césped... Necesito que el tiempo pase, rápido, que me los traiga de vuelta.

Puedo decir que, seguramente, todo vaya bien aquí; en ningún momento he dicho que no sea mi sitio, solo puede que me cueste más acloparme que a otros. Sé que estoy persiguiendo mi sueño, sé que tengo que conocer a personas nuevas y maravillosas a su vez, también sé que empezaré a ser una mujercita pero ¿y si me gustaba estar perdida en la ignorancia?

Os echo mucho de menos. Y acordaros que miréis por donde lo miréis, estéis lo lejos que estéis siempre veremos la misma luna.

sábado, 4 de mayo de 2013

Medalla de cartón

No se trata de planear un momento de tu vida para poder recordarlo. Ni tampoco guardar solamente los mejores de ellos. Aquí entra todo, mejor o peor. Aunque las cosas a veces no salen como queremos, eso es lo que realmente hace que estemos hoy aquí. Un simple día de parque, una pequeña conversación o un rato junto a ellas es lo que realmente importa. Es decir: 'estamos aquí, ahora, es nuestro momento..' y nunca dejaremos de sonreír. Porque a partir de un segundo será todo pasado, un pasado que a pesar de todo no querremos olvidar jamás.
Lo que tenemos ahora es un deleite para los ojos del más miope. Sé que estos años pasará a la eternidad, que estos recuerdos no se ahogan ni en todas las copas que nos beberemos, ni en todas las risas dentro de un pequeño piso, de todos los bailes a lo dirty dancing posibles, ni en todos los alfileres necesarios para coser los amaneceres veraniegos. 
¿No te das cuenta? Mientras leías esto, poquito a poco, vas a haciéndote mayor, y el pensamiento que acabas de tener ya es pasado. Y ¿Porque aún no sonríes? Venga, que la vida es un orgasmo, corta pero intensa. Sal a dejar huella y a mover el culo, Ya sabes... Todo lo que sube baja, sigo hablando de la vida, no confundamos términos.


jueves, 21 de marzo de 2013

Troublemaker.

Me he dado cuenta que ya nadie está por nadie, que cada uno se rasca su pijo, bueno, y el del "macho alfa". Puede que esté en un momento en el que ni mi madre me aguante, que ni yo misma me soporte, que todo me siente mal, o que vea continuamente cosas que me desagraden profundamente. Seguramente que mi mala ostia es continua o que a la mínima salto, pero todo el mundo tiene malas rachas. Y en mi caso, me he dado cuenta, de que mi apoyo de rige en personas que puedo contar con una mano. Si realmente quieres saber lo que me pasa, se canso, pesado, y hasta que no saque una sonrisa no me dejes; eso es lo que me esperaba, pero como me suele ocurrir, la gente no está tanto para mí como pensaba.
Estoy apagada, y es triste que solamente sea yo misma con una persona. Mis risas son pocas y pequeñas mientras que los desagrados y malas palabras hacia mi son abundantes y maliciosas. Hubo un momento en el que siempre estuve, eran realmente mi vida, pero de repente apareció otra persona que ocupó, ocupa y ocupará mucho tiempo de ella. Y, ¿eso es razón para dejar de lado a tu amiga? o ¿No contar apenas con ella?
Puede que haga una dura crítica, pero realmente es triste, y mucho, que mis sentimientos sobresalgan en un folio en blanco, sin una persona que te de un abrazo tras escuchar lo que te lleva pasando meses; es triste ver que antes eras feliz día a día y que mis problemas se arreglaban con unas copas y risas. ¿Y ahora? Ahora soy un cadáver que pasa las semanas con rutinas que lo matan. Seguramente haya personas que puedan darse por aludidas y muchas otras no, ahí está mi reivindicación.
Cuida lo que tienes, y nunca dejes escaparlo. Una ha podido ser en su vida muy buena; pero en esta que me está tocando vivir estoy cansada de ser tonta. Y si me molestan estas cosas, es porque no soy de piedra, porque no soy autónoma, y porque estas cosas, que para unos son granitos de arena, para mí son como montañas enteras.

viernes, 1 de marzo de 2013

Vuelve a iluminarme, estrella.

Un mundo lleno de sueños, deseos, planes. Mi vida planificada poco a poco. Locuras que parecen ya un solo halo de luz. El tiempo ya nos está pisando los talones y nos hace ver como las cosas no son para siempre, y que llegará un momento en el que tu presencia sea un mero recuerdo en la mente de unas mujeres que un día fueron inseparables. Llegará la hora de zarpar; de irnos a ese mundo que llaman madurez y problemas.
Cajas y cajas de ropa, zapatos, bolsos, cajas de recuerdos, de personas, de mi pueblo. Todo me lo llevo, lo quiero todo. Ya no quiero dejara tras nada, todo lo que tengo me gusta. Es tan difícil imaginarme una vida fuera de aquí, cambiar de rutina, cambiar de personas... Empaquetar todo, salir por la puerta de la que durante estos años ha sido mi casa. Fiesta sorpresa de despedida, mi despedida, esa que nunca quería que llegara. Lloros y buenas palabras de amistad. "¡Te echaremos de menos Marta!" Abrazos que no tienen fecha de retorno. ¿Y si cuando vuelva las cosas han cambiado? ¿Y si ya no soy tan importante?¿Y si han podido estar sin mi presencia? ¿Y si se han acostumbrado a que ya no este? Mis amigas. Llegará el momento de coger el coche, de ya no mirar atrás. Cuatro horas de viaje, cuatro horas llenas de recuerdos del verano, de nuestro verano, lleno de risas recordando momentos y de orgullo por irme  a hacer lo que quiero, mi vocación, junto a la persona que quiero.
No quiero dejar las cosas atrás, las quiero dejar en  pause, porque esto lo retomaremos. No os desharéis de mi tan pronto pequeñas. Aunque mi vida se vaya por otro camino distinto al vuestro, quiero deciros, que yo a la distancia me la como con patatas, que aquí estaré para regañaros cuando lo hagáis mal y felicitaros cuando obtengáis lo que realmente os merecéis.  Quiero deciros que habéis sido unas de las mejores cosas de mi pequeña vida, y que como siempre decimos: "Las zarshis unidas jamás serán vencidas"

viernes, 25 de enero de 2013

Date la vuelta... Aquí estoy.

Podría... ¡Podría escribirte un poema! ¡O una canción! ¡Podría trazar tus delicadas líneas en un papel  y hacerte un retrato! O podría... Podría decir que te odio y estar mintiendo, o podría decir que no sufriría ni un ápice si no te volviera a ver y estar realmente jodida... Podría decir que como tú hay muchos y mentir, porque eres único... Podría hacer esto y mucho más, pero no estaría siendo honesta. Todavía no había tenido el placer de cruzarme con alguien como tú, y realmente, me considero afortunada de haberte encontrado en mi camino, como solemos decir nosotros, cosas del destino. Nos enamoramos a 100 km/h, nos besamos a 150... E hicimos el amor a 70. Aunque nos llevara toda la noche, no importaba, solos tú y yo en aquella habitación, sin luces, rifándonos la culpa, jugando en un delicioso tira y afloja, donde se disputaba una bonita guerra de sexos en la que no había vencedor ni vencido. Como agua para chocolate, o como fuego para un cigarrillo, así de necesario fuiste desde que te conocí. Contigo o con ninguno, es mi ley... No es simple palabrería barata como se escucha hoy en día, son palabras puras, cual gota de rocío colgada tímidamente de la hoja de un árbol a primera hora de la mañana, así de puras. Sencillo y en silencio me hallo ahora mismo mientras te escribo estas líneas, como bien ves, no es ni una canción, ni un retrato, ni un poema... Es algo mucho mejor. Las canciones se olvidan al igual que los poemas, y los retratos... No se admira su pureza al 100%; por eso me he decantado por esto; que no sé ni lo que es, no sé si definirlo como prosa, alegoría al amor o una gilipollez que estoy escribiendo antes de ponerme a estudiar... Pero que es mi gilipollez, y que el único que le da significado a estas líneas eres tú, gracias por hacerlo posible. Dicen que las gilipolleces no se olvidan, así que aquí me tienes escribiendo esto, en una habitación oscura y desolada, mientras suena Jason Marz de fondo, mientras te pienso... Mientras recuerdo tu rostro, tu sonrisa, tu voz... Mientras mi cabeza se va a otra parte, a esa otra parte dónde estás tú, esperándome en el sofá de aquella casa, para ver una peli, o simplemente estar tirados viendo la televisión. Recuerda, el día menos pensado, estaré esperando al otro lado de la puerta, con una sonrisa idiota, de oreja a oreja, donde podrás leer tu nombre escrito.