No te preocupes por las cosas que no puedes controlar. Es una forma que tiene la vida de hacer perder los estribos. Conoce gente nueva y haz algo de lo que no te arrepientas nunca. Diviértete y no dejes que nadie te pare. Haz algo maravilloso y después destrúyelo. Crea, imagina, trasforma. No siempre los cambios son malos. Enamórate y cae en el amor. Disfruta cada segundo a su lado sin pensar en lo que pueda pasar. Pon a todo volumen esa canción que te recuerda tanto a él y cántala muy fuerte, como si tu vida dependiera de ello. Manda a la mierda cada instante que él te prometió y después, acto seguido, apaga la radio. <<Ya está, él ya no está ni esa horrible canción volverá a sonar jamás>>. Y después cuando pase el tiempo, mirarás atrás sin remordimientos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario