jueves, 21 de marzo de 2013

Troublemaker.

Me he dado cuenta que ya nadie está por nadie, que cada uno se rasca su pijo, bueno, y el del "macho alfa". Puede que esté en un momento en el que ni mi madre me aguante, que ni yo misma me soporte, que todo me siente mal, o que vea continuamente cosas que me desagraden profundamente. Seguramente que mi mala ostia es continua o que a la mínima salto, pero todo el mundo tiene malas rachas. Y en mi caso, me he dado cuenta, de que mi apoyo de rige en personas que puedo contar con una mano. Si realmente quieres saber lo que me pasa, se canso, pesado, y hasta que no saque una sonrisa no me dejes; eso es lo que me esperaba, pero como me suele ocurrir, la gente no está tanto para mí como pensaba.
Estoy apagada, y es triste que solamente sea yo misma con una persona. Mis risas son pocas y pequeñas mientras que los desagrados y malas palabras hacia mi son abundantes y maliciosas. Hubo un momento en el que siempre estuve, eran realmente mi vida, pero de repente apareció otra persona que ocupó, ocupa y ocupará mucho tiempo de ella. Y, ¿eso es razón para dejar de lado a tu amiga? o ¿No contar apenas con ella?
Puede que haga una dura crítica, pero realmente es triste, y mucho, que mis sentimientos sobresalgan en un folio en blanco, sin una persona que te de un abrazo tras escuchar lo que te lleva pasando meses; es triste ver que antes eras feliz día a día y que mis problemas se arreglaban con unas copas y risas. ¿Y ahora? Ahora soy un cadáver que pasa las semanas con rutinas que lo matan. Seguramente haya personas que puedan darse por aludidas y muchas otras no, ahí está mi reivindicación.
Cuida lo que tienes, y nunca dejes escaparlo. Una ha podido ser en su vida muy buena; pero en esta que me está tocando vivir estoy cansada de ser tonta. Y si me molestan estas cosas, es porque no soy de piedra, porque no soy autónoma, y porque estas cosas, que para unos son granitos de arena, para mí son como montañas enteras.

viernes, 1 de marzo de 2013

Vuelve a iluminarme, estrella.

Un mundo lleno de sueños, deseos, planes. Mi vida planificada poco a poco. Locuras que parecen ya un solo halo de luz. El tiempo ya nos está pisando los talones y nos hace ver como las cosas no son para siempre, y que llegará un momento en el que tu presencia sea un mero recuerdo en la mente de unas mujeres que un día fueron inseparables. Llegará la hora de zarpar; de irnos a ese mundo que llaman madurez y problemas.
Cajas y cajas de ropa, zapatos, bolsos, cajas de recuerdos, de personas, de mi pueblo. Todo me lo llevo, lo quiero todo. Ya no quiero dejara tras nada, todo lo que tengo me gusta. Es tan difícil imaginarme una vida fuera de aquí, cambiar de rutina, cambiar de personas... Empaquetar todo, salir por la puerta de la que durante estos años ha sido mi casa. Fiesta sorpresa de despedida, mi despedida, esa que nunca quería que llegara. Lloros y buenas palabras de amistad. "¡Te echaremos de menos Marta!" Abrazos que no tienen fecha de retorno. ¿Y si cuando vuelva las cosas han cambiado? ¿Y si ya no soy tan importante?¿Y si han podido estar sin mi presencia? ¿Y si se han acostumbrado a que ya no este? Mis amigas. Llegará el momento de coger el coche, de ya no mirar atrás. Cuatro horas de viaje, cuatro horas llenas de recuerdos del verano, de nuestro verano, lleno de risas recordando momentos y de orgullo por irme  a hacer lo que quiero, mi vocación, junto a la persona que quiero.
No quiero dejar las cosas atrás, las quiero dejar en  pause, porque esto lo retomaremos. No os desharéis de mi tan pronto pequeñas. Aunque mi vida se vaya por otro camino distinto al vuestro, quiero deciros, que yo a la distancia me la como con patatas, que aquí estaré para regañaros cuando lo hagáis mal y felicitaros cuando obtengáis lo que realmente os merecéis.  Quiero deciros que habéis sido unas de las mejores cosas de mi pequeña vida, y que como siempre decimos: "Las zarshis unidas jamás serán vencidas"